Otra noche más de insomnio...

Son las cinco de la mañana, altas horas de la noche, donde todo está oscuro, lleno de niebla. Horas en las que todos duermen, todos sueñan y aquí estoy yo, sin poder dormir. 

Una noche más sin poder dormir, una noche más pensando. Una noche más recordando, sintiendo, sin saber que hacer. 

Noches en las que voy mirando el reloj, miro las agujas como avanzan, intentando que su sonido me calme, me relaje y me lleve al séptimo cielo. Sin conseguirlo.

Una noche más, sin poder dormir. 

Una noche más recordando mis errores, mis fracasos, mis decepciones, mis desilusiones. Una noche más sufriendo. 

Una noche más sintiendo que no te esfuerzas, que no vales para nada, una noche más pensando. 

Pensando en lo que haces, en lo que no haces, en lo que valoras, en lo que infravaloras. Pensando en las formas de reventar ese reloj que no te deja tranquila con su sonido, con su tic-tac. 

Noches en vela, noches sin soñar, sin imaginar. Noches de depresión. 

Noches en las que te planteas tu vida. Noches en las que tomas decisiones, que mejor no hubieses tomado. Noches de arrepentimientos, de llantos. Noches de tristeza. 

Noches de aburrimiento, de películas, de series, de libros. Noches perdidas. 

Noches solitarias, frías, sin ese alguien especial.

Noches sin poder dormir. 

No estoy dormido, pero eso no significa que esté despierto

_______________________________

¡Hola gente!

¿Cómo estáis?

Perdonadme por el inicio de este post, pero necesitaba explicar mis sentimientos en estos momentos de inosmnio.

Espero que hayáis pasado unas muy buenas Navidades, rodeados de los que os quieren, de los que te valoran.

La gente celebra la Navidad por diversas razones; algunos por los regalos, otros por el nacimiento del niño Jesús, otros para estar en familia.

Cada razón demuestra lo que valora cada uno.

En mi caso, estar en familia, con los amigos convertidos en familia.

La Navidad es esa época del año en la que ves a gente que no has visto durante todo el año, hablas con primos que no hablas nunca, te reúnes con amigos que se han convertido en familia.

La Navidad nos dirige al fin de año, al comienzo del año.

En estas fechas te da por pensar en todo lo que has hecho, en lo que no, en lo que has vivido, los lugares que has visitado, las personas que has conocido y las que no.

Los humanos tenemos la costumbre de a final de año ponernos filosóficos. Pensando en todo lo anterior. No nos damos cuenta que al hacer esto, solo nos provocamos dolor. Un dolor que te impide ver más allá. Centrándote solo en el pasado.

A estas altas horas de la noche me da por pensar. Pensar en todo lo relacionado con mi vida. Que quiero hacer, que tengo que dejar de realizar. Pensar en mi futuro.

Me doy cuenta que mi futuro aun no lo tengo encaminado. Muchos dirés: estas en la universidad estudiando una carrera. Mal vas si no ves encaminado tu futuro.

La verdad es que tenéis razón. Mi carrera me gusta, me quiero dedicar a ello, pero no lo cuento como mi futuro. Al pensar en mi futuro, generalmente, pienso en mis ideales, mis sentimientos, mis pensamientos, mi personalidad. Cosas muy dificiles de planificar, pero fáciles de pensar.

¿Vosotros cuando pensais en vuestro futuro, en que pensais realmente?

Que tengais muy buen día!

Besos

Carta a un yo más joven

Conoce lo que quieres hacer, mantén firme la idea, y haz cada día lo que debe hacerse, y cada día veras mucho más cerca la meta

¡Hola gente!

¿Cómo estáis?

Hoy he tenido un día de esos que no te crees, te reencuentras con gente que pensabas que no volverías a ver nunca más y conoces a otra. 

Al encontrarme en esta situación me he puesto nostálgica y me ha dado por pensar, cómo he cambiado desde los 16 años. La de cosas que he aprendido. Ojalá me hubieran dicho muchas cosas de las que se ahora. 

Y en ese momento digo, escríbete una carta. A ti misma. A tu yo más joven. Escribe todo lo que te hubiera gustado saber en esa edad. 

Así que perdonad por llenar hoy la entrada con mis tonterías. 

"Querida yo a los dieciséis, 

La moda no es lo más importante en la vida. Hoy lo puedes tener, mañana no. Más adelante sino lo comprobarás por tu misma.

No te conformes. Si puedes hazlo. Sabes que puedes sacar más nota, ve a por ello. No dejes que los otros te influyan.
No permitas que nadie te diga que no vales nada. Eres la única que puede decirlo. Si tu crees que puedes valer para eso, sigue.
Esa decisión tan importante que tienes que tomar, no dudes. Sigue tu intuición. La primera intención es la buena. Luego ya no te "sabrá" igual.

En estos años vas a conocer a mucha gente. No juzgues a nadie. Todos nos merecemos una oportunidad. Quizá por prejuicios pierdes a alguien que merecía estar a tu lado y dejas a otros que mejor que se hubieran quedado en su casa.

No tengas miedo al fracaso. Si te gusta sigue, no abandones por miedo. Sólo tu mete te puede hacer fallar.

Habla. No te calles las cosas. Solo te perjudicas a ti. Terminas con ataques de ansiedad que podrías haber evitado si hubieses abierto esa bocaza que tienes.

Serás la reina de meter la pata. Aprende a disimular.

No te rindas. Si te rindes estás perdida. En tiempos de bajón piensa en esos que con tonterías te hacen reír. En esos que saben cuando estás bien, cuando estás mal y cuando es mejor huir de ti.

Aprende a decir NO. No seas tonta sino se van a aprovechar de ti.

Mantente en tus trece. Mucha gente va a querer que fracases. No dejes que cumplan su cometido.

Vas a aprender a relacionarte, a perder esa timidez, a conversar con la gente. Solo tienes que forzarte. Inténtalo, veras que no duele. Cuando empiezas a comunicarte con ellos descubrirás muchísimas cosas. 

No tengas miedo del amor. Amor no es lo que ves en las películas, el amor es difícil. Es sacrificio. Es pensar en los demás antes que en ti mismo. El amor es desinteresado, no egoísta. Amor es cuando colocas la vida de otro por encima de la tuya. El amor es indestructible si lo cuidas. El amor siempre protege, siempre confía, siempre espera, siempre persevera. No le tengas miedo. 

No te preguntes el porqué, pregúntate el qué. 

La vida... No te preguntes qué es la vida. Tu eres la vida. La vida que, aunque metas mucho la pata, va a ir avanzando día a día. Con muchos obstáculos, pero avanzas.

Y con esto dicho me despido. 

Atentamente,
Tu yo a los veinte y con la cabeza llena de pájaros."

Espero que os haya gustado, y sino lo siento...

Que tengáis muy buenas fiestas y un feliz año nuevo! (Espero escribir alguna cosa antes, pero mejor prevenir que curar)

Besos para todos! 

El que juzgue mi camino, le presto mis zapatos.

El que juzgue mi camino, le presto mis zapatos. 

¡Hola gente!

¿Cómo estáis?

Bueno parece ser que esta semana cumplo la promesa de al menos un post por semana... 

Hoy estaba por twitter, y me he encontrado con esta frase, y he pensado: ¡Qué gran verdad! y no sé como he terminado pensando en una entrada para el blog. 

¿No os habéis encontrado nunca en una situación en la que comentáis algo que queréis hacer a un amigo, familiar, profesor, etc y te dicen , uy pero esto así no. Hazlo así.? En esos momentos, yo me quedo pensando: gracias por tu opinión, que no te he pedido. Si te lo he comentado es porque ya tenía planeado como hacerlo. 

O les cuentas que has hecho y te dicen: buah, pero como lo has podido hacer así. Normal que no te haya salido.... 

En esos momentos toda la sangre te sube a la cabeza y lo empiezas a ver todo rojo. Anteriormente, en estas situaciones yo era la primera en saltar. Decirle cuatro cosas, no muy acertadas y desahogarme. He aprendido que es mejor calmarse, respirar hondo y dar las gracias.

Todos tenemos la costumbre de cuando nos comentan algo nuestros allegados, dar nuestra opinión. Sabemos que no la quieren, no nos la han pedido. Como no la han pedido sabes que no la quieren. Pero aún así, tenemos la necesidad de comunicarles nuestro parecer. 

Si tienes suerte, no te van a mandar a freír espárragos. Lo más común es que el rapapolvo por dar tu opinión te lo lleves. 

Seguramente luego te dices, joder si yo solo quería ayudarlo. No quería que me saltase así. 

Es luego cuando te das cuenta de lo que ha pasado. No en el momento. 

He aprendido a escuchar. Escuchar cuando me hablan, cuando yo hablo. Os preguntareis ¿porqué? pues bien, retirar un acto es difícil. Pero retirar una palabra aun más. No puedes desdecir una cosa. Cosa que dices y la cagas, ya la has cagado para siempre. Y quizá pierdas a una persona que realmente vale la pena por tener una boca demasiado grande. 

Al callarnos, también dejamos a mucha gente que no se lo merece a nuestro alrededor, las cuales se creen que porque no has saltado te pueden pisotear. 

No te sulfures. Piensa que los tiempos cambian, nunca sabes que va a pasar en un futuro. Soy de esas personas que cree en el karma. Así que siguiendo esa filosofía, ya le llegará. También soy muy consciente que a mi también me va a llegar el día, porque hasta que no aprendí a escuchar pasaba más tiempo pensando tierra trágame que con los pies en el suelo. Y por eso perdí a gente que realmente era maravillosa.

Dicen que no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes. Yo creo que no sabes lo que es el dolor hasta que se lo infliges a alguien a quien realmente valoras. 

Y dicho esto, termino por hoy. 

¡Que tengáis muy buen finde! 

Besos para todos

A veces no necesitamos consejos, simplemente necesitamos a alguien que nos escuche

¡Hola gente! 

¿Qué tal estáis? 

Como podéis ver estoy intentando cambiar un poquito el estilo de las entradas. Quiero interactuar con vosotros. De la otra forma noto como que solo "vomito" lo que siento y ya. Sin que vosotros podáis tener vuestra palabra, y realmente me gustaría escuchar vuestra palabra. 

Muchos temas de los que hablo no solo me suceden a mí. Mucha gente pasa por lo mismo, y no sabe que hacer o como expresarlo. Al expresar yo como me siento cuando me sucede a mi, creo que os hago reaccionar. Para bien o para mal. Es decir, quizá pensáis igual que yo o quizá creéis que soy una loca por pensar eso. 

La cuestión es que me gustaría escuchar lo que pensáis. 

Es posible que os preguntéis que porqué cambio el estilo del blog ahora, después de 15 entradas. 

La verdad es que ni yo misma lo sé. Solo tengo claro que este no es solo mi blog. También es de vosotros. De vosotros, porque estáis ahí, apoyandome, aunque quizá no es vuestra intención, yo lo siento así. Os preguntareis porque. Porque siento que me estáis apoyando. Pues lo siento, porque aunque no comentáis seguís viniendo a ver mis posts. Aunque no haya escrito una nueva entrada, tengo visitas. Cosa que cuando lo vi no me lo creía. 

Con esta entrada, a parte de cambiar estilo, quiero daros las gracias. Gracias por leerme, gracias por seguir ahí. Gracias por avanzar conmigo, por dejarme expresarme. En definitiva, GRACIAS. 

Estoy casi segura de que si no hubiera visitas, o hubiera muy pocas no continuaría con el blog. ¿Por que? Porque me sentiria como que no vale la pena expresar lo que siento. Expresarlo ¿Para que? Si nadie se siente identificado o le interesa. Al ver que las visitas crecían me he dado cuenta de que realmente a alguien le interesa, lo que pienso, lo que siento. Quizá hasta os sintáis identificados. 

A parte de daros las gracias quería pedir perdón. 

Perdón por no tener constancia, por no escribir al menos un post por semana. Perdón por haceros pensar que estaba abandonando. No era es mi intención. La verdad es que os podría decir miles de excusas válidas. Pero considero que no merece la pena decir excusas, para una cosa inexcusable. A partir de hoy, intentaré escribir al menos un post por semana. Para que podáis saber que está pasando con mi vida, y con mis pensamientos. 

Bueno gente, que tengáis muy buena noche! 

Besos para todos. 

PD: A ver si consigo cumplir mi promesa de un post por semana....

No recuerdo todo lo que siento pero si siento todo lo que recuerdo

Siento las cosas de modo distinto a cuando las digo 

Algunos sabréis que el viernes pasado cumplí 20 años. Muchos no. 

Muchos os preguntareis porque he tardado una semana en hacer una entrada. A otros os dará igual. 

El caso es que esta entrada me ha dado muchos problemas. He pasado por un momento de, bloqueo de escritor. Sabía que quería escribir, pero no encontraba las palabras. 

Siempre consideraba que me era más fácil expresarme con palabras que con hechos. Pero me he dado cuenta que no. Soy más buena con los hechos que con las palabras. Las palabras son vacías. Los hechos no. Eso no quiere decir que los regale. No. Precisamente se me conoce por una persona a la que le cuesta mostrar realmente como es. 

Muy pocos saben como soy. Los que me conocen se piensan cosas que no. La culpa de esto es mía. He creado una capa protectora para que no me hagan daño, que lo único que he conseguido es no mostrar mi verdadero ya. He mostrado una persona que estoy llegando a odiar. Una persona que no soy yo. Una persona que es todo lo que odio, todo lo contrario a mis creencias. Una persona que no se ni como he llegado a esto. 

Muchos diréis, pues si que te ha dado por pensar.... Y tendréis razón. Serán los 20 años, o que se acerca la Navidad, pero ultimamente no puedo parar de pensar. 

Pensar en que me he convertido, en que quiero convertirme. Me he dado cuenta que la fortaleza interior que he creado solo ha hecho que la gente se aleje. Solo los pocos que se han quedado es porque han descubierto mi verdadero yo. no se como, pero lo han hecho. Otros se han quedado para ver que voy a hacer, como voy a cambiar. Por curiosidad.

Cuando cumplí los 20, llegué a la conclusión de que no quiero seguir así. No me gusta el camino que está tomando mi vida, quiero modificarlo. Ahora solo me falta descubrir cómo... 

Donde quiera que vayas, ve con todo tu corazón.

Disfruta de la vida, hay mucho tiempo para estar muerto. 

Yo hoy tendría que estar estudiando, pero no podía dejar de pensar en el blog, era como si lo echase de menos. Al final he decidido aparcar por unos minutos el temario y ponerme con el blog. 

Muchos diréis: Estás loca. Estudia. El blog siempre estará ahí. 

Y tenéis razón. El blog siempre estará ahí, pero mis pensamientos no. 

Tengo una mente muy inquieta. Hoy puedo pensar una cosa, y mañana todo lo contrario. Quizá la entrada de hoy dará pena, y si la hubiera escrito mañana no. Nunca lo sabré. He decidido ir a por ello. No es como si tardase 4 horas en escribir una entrada... Aunque hay veces que he tenido que pensar muchísimo para poder escribir algo decente. 

Bueno al lío, que no es como si os interesase mi vida.. 

Mi entrada de hoy va sobre dejarse llevar, ir a por ello. Aunque no sea el momento oportuno ves a por ello si realmente quieres. 

Los que creéis en el destino, tomároslo como una señal, si se os ha ocurrido es porque lo tenéis que realizar, no dejarlo aparcado. Si lo aparcas para más adelante, luego sera demasiado tarde. 

En incontables ocasiones, me he encontrado planteándome, ¿que estoy haciendo con mi vida, si yo no quería hacer esto, sino que quería lo otro?, o diciendo, ¿porque no lo hice cuando era el momento?

Me he percatado, que en la vida pasamos más tiempo esperando que haciendo lo que realmente queremos. Esperamos en la cola del super, para llegar a casa, en el banco. Esperamos para dormirnos, a despertarnos. Esperamos a que deje de llover, a que pare el sol, a que llegue la noche. Esperamos para tener fuerza de volver a empezar, para que llegue el momento ideal, a que se den cuenta. Esperamos a ese amor imposible, a ese otro más posible. Esperamos y de mientras desesperamos. Mientras esperamos, no nos damos cuenta de que olvidamos. Olvidamos el por qué de las cosas, el por qué de tus pensamientos. Nos olvidamos. 

He decidido que ya basta de esperar. Basta de hacer el tonto. Quieres algo, ve a por ello. Es una oportunidad única. Nunca sabes que va a pasar el día de mañana. Quizá no te atreves a decirle a esa persona te quiero, y mañana sales a la calle y un coche te mata. Si tienes la oportunidad, no la dejes perder. Está ahí. 

Piensa el porque estamos aquí. ¿Para esperar? ¿Para hundirnos? ¿Para dejar que otros aprovechen tus oportunidades? No. 

Estamos aquí para reírnos del destino, para ir contra él. Si está en tu mano cámbialo.

Se acercan tiempos difíciles...

La preocupación no quita los problemas de mañana, quita la fuerza de hoy…

¿No os habéis encontrado nunca pensando: “los días que me esperan…” o pensar en que estas luchando por nada porque cada vez te va peor? 

Actualmente es como me siento. Este sentimiento en verano no lo tenía, tenia la sensación que cuando empezase la universidad me iba a comer el mundo, iba a destacar. Y realmente estoy destacando, pero de forma negativa. Tengo la sensación que la carrera que he escogido no es para mí, aunque sé que me encanta lo que estoy estudiando… 

Tengo muchos pensamientos contradictorios. 

Un día quiero empezar de cero, dejarlo todo y comenzar con otra cosa y otro quiero seguir, esforzarme y dar lo mejor. 

¿Alguien sabe cual es el correcto? 

Creo que mucha gente se ha encontrado en mi lugar, sino no te dirían cuidado con la carrera que escojas. ¿De todos estos que han estado en mi lugar, que ha sido de su vida? ¿Han continuado y han triunfado? ¿Han abandonado para empezar con otra cosa? ¿Qué ha pasado con ellos? ¿Alguien se acuerda de ellos? 

Tengo la sensación que solo nos acordamos de los logros. No del camino que han seguido para llegar ahí. No de las dificultades que se han encontrado, no de los obstáculos que tenían en el camino, no de como los han afrontado. 

Actualmente, a mi me importa muy poco si han llegado al final o no. Me importa como han salido de este espiral emocional que no trae nada bueno. 

Este espiral solo hace que te hundas, que dejes de pensar en lo importante, que te concentres en cosas tontas, que te cuestiones tus opiniones. 

A medida que voy escribiendo este post, me voy dando cuenta que es una tontería todo lo que voy pensando. 

Yo empecé esta carrera no muy convencida, lo mío era la fotografía, diseño gráfico, audiovisuales, cosas así. Pero cuando tenía que escoger una carrera me planteé muchas cosas como: ¿Si hay otra crisis económica, que hago? ¿Me como las cámaras? ¿Que es lo que actualmente rige el mundo? La tecnología. 

Tuve claro que quería estudiar una carrera que me permitiese vivir de ella. Que no iba a pagar para nada. Que si pagaba lo tenia que aprovechar. Y me topé con Ingeniería Informática. 

Al ver las asignaturas dije, bueno no puede estar del todo mal. Empecé el curso y todo perfecto, las asignaturas me encantaban, iba haciendo y tal. Pero cuando las cosas se complicaron seguí en mi línea de vaga. Ahí es cuando me di cuenta que quizá no había escogido bien. 

Aunque ahora me doy cuenta que sí he escogido bien. Lo que pasa es la vagancia, el conformismo. Estoy acostumbrada a no estudiar, a ir a ultimo momento y en una ingeniería no te lo puedes permitir. Creo que cuando consiga vencer la vagancia y el conformismo, superaré mis miedos. Porque en verdad, lo que tenemos es miedo. Miedo de triunfar, de fracasar, de decepcionar a los que nos quieren. Tenemos miedo. 

Algún día diré, no fue fácil, pero lo logré.

Ten una cosa clara, no hay nada que te detenga, excepto tú misma/o. Solo hay una pregunta que debes hacerte: “¿Qué harías si no tuvieras miedo?” Piensa en ello.

A veces el cansancio no entra por el cuerpo, sino por el corazón

A veces el cansancio no entra por el cuerpo, sino por el corazón. 

Muchas veces nos encontramos cansados físicamente, pero ahí seguimos. Al pie del cañón, preparados para darlo todo, para bailar hasta que te duelan los pies, las rodillas. Estamos ahí disfrutando de la vida. Muchas otras estamos tan agotados emocionalmente que no tenemos ganas de nada. Solo queremos estar en la cama acurrucados sin hacer nada y que la vida pase. Otras veces te sientes como si no quisieras seguir aquí. Sientes como si estuvieras fracasando en todo, y te dan ganas de tirarlo todo por la ventana y decir basta. 

No hay nada malo en agotarse físicamente. Pero el cansancio emocional es mucho más peligroso que el otro. Cuando te sientes que ya no vales nada, que nada tiene sentido, realmente eres una bomba a punto de explotar. ¿No os habéis encontrado nunca tan hartos de todo que a la mínima que te dicen algo saltas y tienes ganas de pegar a alguien o algo? Yo reconozco que me he encontrado muchas veces en esa situación. Aun ahora cuando intento controlarlo me encuentro algunas veces en esta situación, con ganas de terminar con todo el mundo, con ganas de salir a la calle y pegar un grito tan fuerte que los pajaros emigren a otro país. Eso es la impotencia. Impotencia al ver ciertas cosas, al ver los valores de la sociedad, al ver mis propios pensamientos. 

La impotencia no te aporta nada, solo dolor. Y no solo la impotencia, la sociedad también tiene gran parte de culpa en las depresiones de la gente. Ya sea con los estereotipos, con el racismo, con las noticias mismo. Parece que en vez de ayudarte, te quieran bajo tierra. 

Soy realista, y no podemos pedir milagros, pero a veces enciendes la televisión y pones cualquier canal donde estén emitiendo el noticiario y eso parece el telemuertos y un programa de corazón. Solo hablan de a cuanta gente han matado, de cuanto se ha gastado tal famoso en tal cosa, de cuanto debe tal a Hacienda… Y no hablan de lo importante. De como está el país, de como sobreviven los maltratados, de como ha conseguido tal persona llegar a tal lugar, de como han conseguido ayudar a los países tercermundistas…

No se a vosotros, pero a mi a parte de saber a cuanta gente han matado debido al maltrato, me gustaría saber a cuanta han salvado. Porque de poco sirve, gastarse dinero en anuncios sobre el maltrato si no salvan a nadie. Te puedes llenar la boca con palabras pero no con actos. Y los actos son los que valen. Las palabras no. Las palabras se olvidan. 

A parte de la sociedad, una persona se autodestruye. Con los sentimientos, pensamientos te vas matando tu mismo poco a poco. Creyendo que no vales nada, que no sirves para nada, que solo estorbas, te vas hundiendo, hasta tocar fondo. Y una vez tocas fondo salir cuesta mucho más que si te das cuenta a tiempo. 

Muchas veces no nos damos cuenta, pero al forzarnos tanto, al intentar ser los mejores, nos creamos muchas inseguridades, y al ver que no conseguimos nuestro propósito nos hundimos. Tenemos que aprender a intentar conseguir las cosas paso a paso, sin prisa. Si intentas conseguir en poco tiempo muchas cosas, no vas a conseguir nada. Te vas a saturar y te vas a hacer más daño que nada. 

Parece una tontería pero contar tus problemas ayuda, ya sea a tus padres, a tu mejor amiga, o en un blog mismo. Siempre habrá alguien ahí que te escuchará, sin juzgarte y te dará consejo. Soy muy consciente que no todo el mundo sabe escuchar sin juzgar, y que en tiempos malos no quieres consejos de nadie, quieres que te dejen tranquilo y que sigan con su vida, aunque la tuya no siga. Tenemos que aprender a escuchar a los demás, a dejar que nos ayuden. Si lo conseguimos seremos mucho más felices y no estaremos tan cansados. 

Mejor que te canses porque has estado bailando, o jugando a la play, hasta las 7 de la mañana, que no por tus propios pensamientos.

Creo en ti

Después de 10 entradas en el blog, me he dado cuenta de una cosa. Me gusta cómo lo estoy encaminando, pero no del todo. Al principio cree este blog para expresar lo que siento, como pienso e intentar a ayudar a otros que estén en la misma situación que yo. Algunas veces lo consigo, otras no. Me gustaría, si alguien me está leyendo, que deje un comentario, en anónimo o con su nombre, eso es lo de menos, diciendo si se siente identificado conmigo o si estoy loca.

Me doy cuenta de que yo puedo poner lo que pienso, pero no se lo pensáis, los que me leéis. Y me da rabia. Rabia por no poder compartir opiniones, por no poder comentarlas, por no saber que pensáis. Creo que esto sólo lo conseguiré si me empiezo a abrir un poco más. No todo el mundo piensa de la misma forma, ni pretendo conseguir que penséis igual. Cada uno piensa lo que quiere y reconozco que pienso cosas muy locas. Así que con un loco "en la familia" hay suficiente.

Me doy cuenta de que he expresado mis sentimientos, pero sólo los superficiales. Que los verdaderos, los que tengo más enterrados no los he compartido con vosotros. Y en cierta forma siento como si estuviera fallando. Porque muchas veces he dicho que la opinión de los demás te tiene que dar igual. Pero realmente me doy cuenta de que no los he puesto aquí, porque no me da igual. Me importa vuestra opinión. Sea mala o buena. Pero me importa.

Eso no quiere decir que si es mala, voy a dejar el blog. Lo siento si es lo que os gustaría pero no. Este blog, aparte de entretenerme, me ha ayudado muchísimo en mi forma de ver las cosas, en la forma de plantearme mi vida. Me he dado cuenta de que no es lo mismo decir una cosa que hacerla. Y con el blog, he conseguido hacer muchas cosas que pensaba que nunca haría. Y dejar de hacer otras que hacía normalmente. Nunca me pensaba que en mi vida tendría constancia en algo. Siempre empezaba las cosas y a la mínima abandonaba. Pero desde que empecé el blog se ha terminado eso. Lo que empiezo, lo termino, y no paro hasta conseguirlo.

Creo que nos hace falta más autoestima, más ánimos. Muchas veces no te dicen 3 simples palabras, las cuales necesitas más que nada. Ya sea porque estás dudando de ti mismo, porque dudas de la situación o de lo que sea. Echas en falta 3 palabras que no son difíciles de decir. Necesitas un CREO EN TI.

Hoy mi post va para todas esas personas que necesitan un: Creo en ti.

Creo que eres capaz de todo, eres capaz de triunfar, de cumplir tus sueños. Eres esa persona capaz de todo. Aunque este en un mal momento, te levantas y sigues adelante. Eres diferente. Eres especial. No dejes que nadie te diga lo contrario. Desde el primer momento en que pones el pie en el suelo por la mañana, eres diferente a los demás. Eres esa persona que sigue cuando cree que ya no vale la pena intentarlo, eres esa persona "tozuda". Eres tú.

Cuidado con los miedos, les encanta robar sueños

Cuidado con los miedos, les encanta robar sueños.

Pequeñas personas, grandes miedos. Grandes personas, grandes miedos. Los dos tienen en común el tamaño de sus miedos. Todos los miedos son grandes. No los podemos infravalorar. Si los infravaloramos, toman el control de nuestra vida. Nos impiden avanzar, prosperar, nos impiden alcanzar nuestros sueños. Los sueños solo se cumplen, si vences a los miedos.

En mi vida he cometido muchos errores, he tropezado con la misma piedra dos veces y cuando pensaba que era la última, me empujan a la tercera. He llorado por quien no debía, y he reído con falsas amistades. He perdonado mucho, hasta que me tomaron por tonta y deje de regalar los lo siento. He callado te quieros por miedo, y otros los he regalado por cumplir. Me he levantado muchas veces con ganas de comerme el mundo, otros días con ganas de que el mundo se me comiera a mí. He gritado con fuerza, pero mi voz nunca salía. He callado verdades para no hacer daño. 

Hasta que aprendí. Aprendí que los amigos son los que cuentas con los dedos de una mano. Los que están en lo malo y en lo bueno. Los que cuando los necesitas no tienes que llamarlos. Saben que algo está mal. Que los de tu casa son lo primero. Los otros están de más. Que amigos se convierten en los de casa. Y que familia se convierte en desconocido. Que, en momentos de bajón, solo hay esa persona que te puede animar, y que generalmente no está. Si en tu caso está, consérvala. No la dejes marchar. Si la dejas marchar nunca va a volver y se va a convertir en lo que más odias. Se va convertir en esa persona a la cual han hecho daño. Esa persona que harta de sufrir decide volverse como los demás, un mortal egoísta, al cual le importan muy poco los sentimientos de los demás. 

No dejes que otros guíen tus sueños. Los sueños son tuyos. Tú los diriges. No dejes que socaven tu ánimo. Sin ánimo, no hay esperanza. Sin esperanza, no hay sueños. 

No permitas que nadie guíe tu vida. Ni miedos ni personas. Tu vida es tuya. Tú haces lo que quieres con ella. Si quieres salir a la calle con vestido y deportivas, sal. No permitas que los prejuicios de la gente te guíen. Saca tu personalidad a la calle. Tú, con tu personalidad, eres más que una parte de un colectivo. Eres un colectivo. Tú eres tu mundo. No permitas que nadie ni nada te quite tu mundo.

ESPERANZA

Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes. 

Tema que crea mucha controversia, hoy estaba batalladora y digo voy a hablar de este tema. No todo el mundo está de acuerdo, muchos creen que es de tontos, otros solo pueden vivir bien si sienten esto. Esto es la esperanza, la fe. No fe religiosa, que también, otra tipo de fe. Fe en ti mismo, en las personas. Esperanza. Esperanza en que mejoren las cosas, las personas, tu mismo. 

Muchos dicen que, si no crees en nada, ¿cómo puedes seguir avanzando? Otros dicen que si crees en una cosa invisible, que nadie ha probado, eres un ingenuo. 

¿Quién tiene razón? ¿El que no cree en nada, o el crédulo? 

En mi opinión los dos. La gente busca su propia forma de avanzar. Muchos son instruidos por los padres, profesores, pero cuando empiezan a madurar, empiezan a seguir sus propias opiniones, sus propias creencias, o dejan de creer. 

Son los dos iguales, los dos consiguen avanzar a su manera. En mi caso, soy una crédula. Necesito creer en algo para poder avanzar. Ese algo es la esperanza. Esa esperanza que esperas a que llegue algo para que puedas avanzar, esa esperanza es la suerte. Pero me he dado cuenta. Que las cosas no vienen por si solas. o Luchas o te hundes. Tú decides que quieres que pase. Pero si no haces nada te hundes. 

Luchando consigues avanzar. Siendo cabezón solo le das vuelta a un mismo tema, si aceptas las cosas, sin rebajarte, avanzas. Aunque también creo que hay un momento para cada cosa. Si has luchado y no has conseguido nada, es que no era el momento. Tienes que esperar a que sea el momento adecuado. Hay un momento para cada cosa. Si no funciona no lo fuerces. Esto es como un puzle. ¿Si una pieza no encaja, a que no se te ocurre coger un martillo y clavarla a la fuerza? No. Coges otra pieza y pruebas. En la vida real es lo mismo. Si no has conseguido nada, prueba otra manera. Prueba otra cosa. No te quedes estancado en lo mismo toda la vida. 

Muchas decisiones valen más tomarlas sin pensárselo. Otras no tanto. Con el tiempo aprendemos a diferenciar que situaciones son más volátiles que otras, en cuáles podemos actuar sin pensar y en cuáles no. 

Si te hundes, no pierdas la esperanza, busca otra manera de seguir. Si hoy no funciona, ya funcionará. No presiones. Hay un tiempo y lugar determinado para cada suceso. Si lo fuerzas no será real. 

¿Decepcionada con el mundo o conmigo misma?

¿DECEPCIONADA CON EL MUNDO O CONMIGO MISMA?

¿No habéis dicho nunca: estoy decepcionada con el mundo, o que decepción más grande que esto siga pasando en el mundo?

¿Realmente estamos decepcionados con el mundo? Si te paras a pensar, en el mundo hay más de 7 mil millones de personas, ¿Realmente estamos decepcionados con toda esta gente? ¿O sólo con algunos? ¿Estamos decepcionados con ellos o con nosotros?

Te paras a pensar, y te das cuenta que realmente no estas decepcionado con el mundo, estas decepcionado con lo que te rodea. Pero... ¿Estás decepcionado o tienes los estándares de valor muy altos? ¿O son ellos que los tienen bajos? ¿Eres un perfeccionista o al mundo no le importa la perfección? ¿Eres generoso, o todo el mundo solo piensa en él? ¿Eres el único que cree en el amor o a la gente le dan igual los sentimientos?

Muchas preguntas, la mayoría sin respuestas. Si tienen respuesta, es una válida para pocos. No una respuesta global.

En la escuela te enseñan unos valores, que según ellos son muy importantes para el día a día. En principio en tu casa te enseñan otros. Muchas veces coinciden, en otras no. ¿Por qué no coinciden? ¿No tendrían que ser los mismos? Los dos te preparan para el futuro, pero ¿Por qué para unos es más alto el valor de la competitividad que el del compañerismo? ¿Porque en la escuela te ponen barreras y en tu casa te las quitan?

En las tardes en las que no tienes nada que hacer y te pones a pensar te das cuenta de muchas cosas, esas cosas que realmente tienes miedo a preguntar en voz alta, por miedo al qué dirán, por miedo a quedar como un tonto, por miedo a que no sepan la respuesta. No tengas miedo de preguntar, preguntando se llega lejos. El que no pregunta no avanza, las preguntas mueven el mundo. Si preguntas, otros se ponen a pensar, a pensar en lo que está bien, en lo que está mal, en que se tiene que mejorar, en que se tiene que dejar de pensar. Simplemente se ponen en movimiento y se mueven. Se mueven para dejar de estar decepcionados. Decepcionados con quien sea. Solo se mueven para quitarse ese sentimiento negativo, sentimiento que solo te quitas si dejas de pensar en ti, y piensas en lo que te rodea.

Doy las gracias por esa gente, esa gente que se mueve para mejorar tu mundo, tu día a día, aunque sean pocos, están ahí y te facilitan el avanzar, el poder prosperar, y realmente ni los notamos. Son personas que no lo hacen por el reconocimiento, sino porque quieren. Quieren que tú puedas vivir mejor, que tú no te sientas decepcionado. Decepcionado con lo que sea. Pero intentan evitarte el sentimiento. Así que, Gracias, muchísimas gracias. 

NUNCA TE RINDAS

DONDE TERMINA EL ESFUERZO, COMIENZA EL FRACASO. NUNCA TE RINDAS.

Nunca te rindas, bonita frase. Fácil de decir, difícil de aplicar. ¿No os habéis encontrado nunca diciendo, voy a hacer esto, lo otro, luego esto… y terminando haciendo nada, o empezarlo pero terminar al día siguiente? ¿al hacer eso, nos convertimos en fracasados, en perdedores? ¿O simplemente somos así y nunca vamos a cambiar? 

En mi vida he tenido muchas ideas, ideas que si hubiese llevado a cabo ahora mismo quizá estaría en otro lugar. Ideas buenas o malas, pero como nunca las he desarrollado se han quedado ahí, en ideas. No en hechos. Los hechos, son las ideas que nos atrevemos a exponer al mundo, unas ideas que no sabes como van a terminar, pero tienes la voluntad y la fortaleza para decir: Mi idea vale, y lo voy a demostrar. 

Las cosas se quedan sin hacer por pereza muchas veces, pero otras veces por el miedo. Miedo a descubrir su final, miedo al fracaso, a la opinión de la gente, porque seamos realistas, la opinión de la gente importa, aunque te digas que no te tiene que afectar. Si no te afectase, vivirías en un mundo en el cual solo te importa lo que pienses tu y ya. Sin amistad ni nada. Porque la opinión que más nos importa es la de los seres queridos. La del vecino también, pero no tanto. Te puede molestar una opinión, pero tienes que aprender a tolerarlas y contestarlas. Tienes que aprender a diferenciar a las personas, sobretodo a aquellas que solo intentan hundirte. Porque de estos hay muchos. No todo el mundo es generoso, algunos, sigo sin entender por que, buscan tu fracaso. 

El fracaso, se lo busca uno solo, no necesitamos a nadie mas que nos ayude. El fracaso es dejar de implicarte. Cuando fracasas es porque no te has esforzado lo suficiente. Si no te has esforzado lo suficiente, no lo querías tanto. Si quieres, puedes. O al menos eso dicen. Yo reconozco que muchos de mis fracasos, que han sido muchos, son debido a dejar de pelear, de esforzarme. Pero he llegado a un punto en que estoy harta. Quiero cambiar el rumbo de mi vida y empezar a ganar. Empezar a dejar de fracasar. Porque el fracaso me ha acompañado tanto tiempo que estoy harta. El fracaso, a parte de dejarte sin nada, te deja también sin autoestima, sin ganas de hacer nada, pensando en que no vales para nada. El fracaso realmente, es mental. Si tu tienes una estabilidad mental, no fracasaras. ¿Por que la gente que empieza algo lo termina? Porque le ponen ganas, están motivados en su proyecto, sea el que sea. Mucha gente que está motivada, fracasa por culpa de otros, pero los que realmente ganan, son aquellos que superan sus miedos, superan las opiniones, se apartan de la gente que les quiere hundir y luchan. Luchan por sus sueños. Esos sueños que tuvieron y que tienen la intención de cumplir. Esa gente son valientes. Valientes que triunfan, valientes que saben lo que cuesta triunfar. 

He decidido dejar atrás mi era de fracasada, y convertirme en valiente. A ver cuanto tardo.

Problemas

Observo, me callo, me decepciono, sonrío y continúo.

Esta frase es el “motto” de muchísima gente, incluida yo. Muchas personas no afrontamos los problemas, dejamos que ocurran y seguimos. Siempre nos dicen que los problemas se tienen que afrontar, sino luego no puedes continuar viviendo, que son como una pelota que se va haciendo mas grande, hasta que explota. Somos de esta manera, somos personas con muchísima paciencia, para algunas cosas pero para otras no. Personas que hartas de afrontar problemas, cuando se topan con uno nuevo, dejan que pase como si nada. Acostumbrados a tener que lidiar con ellos, llegan a un punto en que dicen basta. Simplemente se quedan ahí parados, esperando a que pase la tormenta. Porque como dicen, después de la tormenta siempre viene la calma. (Aunque luego vuelva la tormenta). 

Muchos problemas no son afrontados, miles de personas consideran que para que perder el tiempo afrontandolo, lo esquivas, o lo dejas pasar y luego se termina. Pero realmente no se termina nunca. El problema si no lo solucionas no se solucionará por arte de magia. Quizá hibernará por un tiempo, pero luego volverá. 

De pequeña me decían: “Oir ver y callar” y esta frase la he aplicado en todo lo relacionado con mi vida, hasta que he dicho basta. Basta de callar, de no afrontar los problemas, de sufrir interiormente. Los problemas se tienen que afrontar, tarde o temprano, te guste o no. Si no se convierten en tu sombra, en parte de ti, hasta que no puedes más y explotas. 

Decir que vas a afrontar el problema es fácil, lo difícil es aplicarlo. No todo el mundo lidia con las cosas de la misma manera, ergo, no todos podemos actuar igual. Cada uno tiene que encontrar la forma de poder actuar, sin perder su esencia. Enfrentar un problema no es repartir “hostias a todo dios”, es argumentar, dialogar, en un tono más alto o bajo, pero sin llegar a las manos. 

Aprender a abordar un problema es un camino muy largo, no se consigue de la noche a la mañana, pide su tiempo, su dedicación. Como cuando intentas convertir una cosa en un habito de tu día a día. Dicen que para que algo e convierta en un habito, tienes que repetir ese proceso 21 días seguidos. Solo luego podrás decir que es un hábito. Con los problemas pasa igual. A medida que va afrontandolos uno a uno, luego se convertirá en una cosa que harás con los ojos cerrados. 

Aunque no lo parezca, los problemas no son negativos . Te proporcionan una lección que puedes seguir aplicando día a día. Un problema es una oportunidad, una oportunidad de mejorar, de madurar, de crecer como persona. Un problema es positividad. Es optimismo.

Primera semana

Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo.

Primera semana de universidad superada. Esta cita refleja mi situación actual. En 2 días he aprendido cosas, que en bachillerato me costaron dos meses aprenderlas. Todo el mundo dice que en la universidad, no explican bien, pasan de los alumnos, que los profesores van a lo que van y les da igual el alumno. Soy de esas personas que piensa lo contrario. En una semana me han demostrado que se interesan por ti, intentan que aprendas las cosas, si no lo entiendes lo repiten hasta que lo entiendas, y sino pierden parte de su tiempo libre para enseñarte. 

No siempre nos podemos fiar de lo que dice la gente. Solo hasta que te encuentres en la situación sabrás si es verdad o no. 

En la universidad me he dado cuenta que los profesores no tienen la misma filosofía que los profesores de instituto. En un instituto los profesores, la mayoría, no todos, les da igual si lo has entendido o no, si te has perdido te dicen que te lo mires en casa y seguro que lo entiendes luego con calma. En la universidad, en una clase de 50 personas, si haces una pregunta, por muy tonta que sea, se toman la molestia de contestartela en el mismo momento, si no lo has entendido te lo vuelve a repetir con otras palabras, y si sigues sin entenderlo te da una hora particular para explicártelo de otra manera. No todo el mundo hace el esfuerzo para que la gente avance, porque en esta vida, parece que este mal ayudar al prójimo e intentar que prospere. 

La mayoría de las veces que he preguntado algo en clase, me han contestado: luego te lo digo que tengo que seguir con la clase. En la universidad cuando he preguntado me han dicho: mejor que me lo preguntes ahora que sino luego te perderás y será mas difícil. No tengas miedo a preguntar. 

En el instituto solo se preocupan de que termines cuando te toca y dejes de seguir en su clase. En la universidad se preocupan de formarte adecuadamente. En convertirte en un profesional. Si tienes que estar 2 años en la misma clase, lo estarás. Hasta que seas un profesional en esa asignatura. 

Muchas de las cosas que te enseñan en el instituto las recuerdas, pero lo que te enseñan en la universidad lo aprendes. (Más te vale si te quieres dedicar a la profesión que estas estudiando) 

Escoger una carrera es lo más difícil que puedes hacer en tu adolescencia. A parte que te plantean en serio el tema de escoger una carrera en los dos últimos años de instituto. Yo siempre había dicho que quería hacer medicina. Luego en 4º de ESO dije que quería ser fotógrafa. No cambié de opinión hasta dos meses antes de la selectividad. No tenia mucha confianza en la carrera escogida, pensaba que no me gustaría o la encontraría muy difícil y me daba mucho miedo que no me gustase, que tuviera que pagar un año entero de la carrera para luego decidir que no quería seguir estudiando eso, y perder dinero. 

A día de hoy, solo llevando una semana de clase puedo decir que no me he equivocado. Estoy donde tengo que estar, estudiando la carrera que me gusta, y con deseos de terminarla en cuatro años y ponerme a trabajar de eso. 

Siempre estaré a tiempo de estudiar algo involucrando la fotografía, o sino, vivirla como una afición. 

No tengáis miedo a equivocaros. (Pero escoged bien, que la carrera es cara.)

SÍ PUEDO

Cuando te digan "no puedes" demuéstrale que nada es imposible.

¿No os habéis encontrado nunca en la situación en que planteas hipotéticamente a un amigo, un familiar, un profesor una idea y te dicen: no puedes hacerlo? ¿Quién eres tu para decirme si puedo hacerlo o no? ¿Sabes cómo pienso?¿Cómo pretendo llevarlo a cabo?

No entiendo a la gente que, ya por ser más mayor que tú o por tener más experiencia se creen capacitados para poder dirigir tu vida. Mi vida la dirigo yo. Soy yo quien decide qué puedo hacer y lo que no. 

No tienes porque dejar que la gente mande sobre tu vida. Todo el mundo da su opinión de las cosas, algunos con más tacto que otros, pero todos intentan decirte que hacer. La persona que no es así, es porque hay alguien que intenta dirigir su vida y sabe lo que es. 

Siempre me han dicho lo que tengo que hacer, cómo hacerlo y si estaba capacitada para hacer o no las cosas. He llegado a un punto en el que he decidido decir basta. Basta de dejarles regir mi vida. Basta de que me infravaloren. 

Si quieres realmente una cosa, eres capaz de hacerlo. Solo hace falta que lo desees. Puedes querer hacer muchas cosas, pero si realmente no lo deseas, no lo harás nunca. Siempre había dicho que quería hacer un blog, pero siempre encontraba excusas para no hacerlo. Finalmente, este verano, trabajando cada día, sin día de fiesta, he encontrado el momento para hacerlo. Pero reconozco que esta vez, estaba más ilusionada con crear un blog que las otras veces. 

Cuando te digan que no puedes, demuéstrales que sí, lucha por tus sueños. Tus sueños solo los puedes cumplir tú, no vendrá nadie más a realizarlos por ti. Eres la única persona que puede cambiar las cosas. Cuando te digan “no puedes” diles SÍ PUEDO, y dales en los morros. La gente no puede soportar que otro cumpla sus sueños. ¿Será porque no lo han probado? Una vez lo prueben no podrán parar. 

Adiós y gracias

Hoy me despido. Me despido de estas vistas, de esta carretera, del pueblo al final de la carretera, de sus habitantes. Pero sobretodo, del camping. Me despido del lugar, de los clientes, de los trabajadores, de los jefes, de los propietarios. De todos. Gracias por este gran verano. Por permitir que evolucione, que madure un poco más, que pierda parte de mi timidez. Gracias por todo. Gracias, por las risas, los cabreos, las broncas, los clientes pesados, los simpáticos. Todos. 

De todo he aprendido algo: de los cabreos, broncas y clientes pesados, a morderme la lengua; de los clientes simpáticos, a que con una sonrisa te alegran la tarde. Después de estar 3 meses ahí, trabajando como nunca, día sí y día también, puedo decir que formo parte de la familia. Una gran familia, que nos ayudamos, nos apoyamos, nos entendemos, pasamos unos grandes momentos. Gracias por las memorias de este verano. Gracias por estar ahí. Hasta pronto!

Mismo lugar, misma hora, pero a la vez diferente

Esta imagen refleja la personalidad de los individuos. Todas actúan diferente, pero son la misma persona. La gente lo llama doble personalidad, hipocresía, falsedad, etc. Yo lo llamo saber adaptarse. Adaptarse a la situación, al entorno, a las personas que te rodean. No todas las situaciones requieren la misma actitud. Soy consciente que mucha gente por decir esto me tachará de falsa, pero los que lo dicen son los que actúan de la misma forma pero sin reconocerlo. 

La hipocresía no es nada más que un muro de protección para no mostrar tus verdaderos sentimientos o pensamientos. La gente es “hipócrita” cuando quiere agradar a todo el mundo, cuando no quiere tener conflictos con la gente debido a las diversas opiniones. Seamos realistas, caerle bien a  todo el mundo no es posible. Todo el mundo tiene su punto de vista de las cosas, no todos pensamos igual, aunque seamos iguales estructuralmente, interiormente somos completamente diferentes. 

La persona que necesita el muro de protección es aquella a la cual le importa mucho la opinión de la gente, o aquella que ha recibido tantos golpes verbales que para no llevarse más, intenta complacer a todo el mundo. 

 Una cosa que tengo muy clara es que tus acciones tienen repercusiones. Depende de la forma en la que actúes, otra persona puede salir dañada. Si intimidas a un niño ese niño se volverá introvertido, si lo ayudas cuando lo están intimidando se volverá extrovertido. 

La gente no tiene nunca en cuenta las repercusiones de sus acciones. Hoy en día aparte de los malos tratos, hay muchos niños en la escuela los cuales sufren “bullying”, ya sea por parte de los compañeros, o por los profesores, debido al físico o a la inteligencia. Hay muchísimos niños, y no tan niños, con depresión debido a los malos tratos, pero ¿os pensáis que el acosador ha dejado de vivir por provocarle al niño una depresión que puede terminar en muerte si no lo tratan? No. Ellos siguen con su vida como si no hubiesen hecho nada, como si no hubiera pasado nada. Al niño acosado, le han intimidado tanto que duda de sus propios pensamientos, de sus creencias, de su personalidad. Este niño, aunque es el mismo de antes, ya no piensa igual, sabe con quién tiene que ser simpático y con quien lo tiene que ser aún más para evitar volver a sufrir. 

En definitiva, no podemos tachar a alguien de falso cuando no sabemos la historia que hay detrás, el porqué de su personalidad. 

Cambios

Que mejor forma de empezar un blog con esta cita, ya que este blog existe debido a que mi vida ha sufrido diversos cambios. Actualmente esta cita refleja mi situación. Considero que escribir este blog me va a ayudar en muchos momentos, ya sea porque es un espacio donde expresar mis opiniones o porque es una forma de matar el aburrimiento. Aún no lo tengo claro del todo. 

Como dijo en su día Sócrates : Solo sé que no sé nada. Y es una gran verdad. Actualmente mi vida ha sufrido tantos cambios que no sé lo que me gusta, ni lo que quiero hacer con ella. Tengo claro muy pocas cosas, las cuales espero que me ayuden a descifrar el resto, pero nunca se sabe. Es muy posible que este blog solo tenga esta entrada y nunca más lo vuelva a abrir, o puede que mañana siga con otra entrada y así cada día. El tiempo dirá. 

A mucha gente le gusta tenerlo todo organizado. Yo era de esas personas, hasta que me di cuenta hace poco que cuando no planificas es cuando mejor salen las cosas. Me he pasado toda mi vida oyendo: "no planifiques las cosas, las cosas salen mejor cuando son de improvisto". Cuando me decidí a no organizar y vivir al día, luego todo el mundo me decía: Planifica las cosas, así nunca te irá bien en la vida si vives al día". Ahí dije basta. Basta de escuchar a la gente, basta de intentar complacer a todo el mundo para solo llevarme decepciones. Basta de intentar ser perfecta, porque seamos realistas, ¿Quién en esta vida lo es? Todo el mundo tiene, por decirlo de una manera, su fallo. Lo importante es que lo reconozcas. Yo reconozco que mi carácter no es el mejor. Pero también sé que detrás de mi personalidad y carácter hay diversas razones. Razones para mi muy válidas pero para otros quizá no. Pero lo importante es que para mi lo sean. Soy yo la que tengo que vivir día a día conmigo misma, no la gente de la calle. Los que viven conmigo saben como soy y me aceptan, los demás, hablando mal, que les den. 

Mi vida ha estado repleta de cambios, algunos buenos, otros no tanto. De los dos he aprendido bastante. He aprendido a ser mas cauta, a no confiar tanto, a confiar en quien de verdad te lo demuestra, a valorar más las cosas. Pero sobre todo, a valorar a las personas como seres individuales, y no como colectivo. 

Este verano me ha servido para darme cuenta de muchas cosas, sobretodo me ha sido de utilidad para diferenciar lo importante de lo superfluo. He descubierto quien está de verdad a mi lado y quien lo está solo por interés. Que es lo que me interesa para mi futuro y lo que no. Sobretodo me ha servido para perder la timidez con las personas, y madurar, aunque sea solo un poquito, ya que considero que siempre voy a tener una parte de inmadura. 

Este año, es el año de los cambios. Empiezo la universidad dentro de poco, sé que tengo que hacer cambios en mi vida para poder prosperar. No sé lo que va a pasar.. Solo el tiempo lo dirá.. 

Hasta mañana. (Sólo si consigo esclarecer mis pensamientos)